Resulta claro que, con independencia de las cosas que nos separan, existe un profundo sentido de nuestra humanidad compartida y de nuestra fragilidad ante esos acontecimientos tan terribles.
La sesión de hoy ha ofrecido a los Estados Miembros la oportunidad de mancomunar su sabiduría a fin de ayudar a los países afectados, y demuestra el espíritu de unidad de los seres humanos en tiempos difíciles y de desastres.
Pero todavía no había andado medio kilómetro, cuando encontró una zorra coja y un gato ciego, que iban andando poquito a poco y ayudándose uno a otro, como buenos amigos.
16 El Angel que me liberta de todo mal, bendiga á estos mozos: y mi nombre sea llamado en ellos, y el nombre de mis padres Abraham é Isaac: y multipliquen en gran manera en medio de la tierra.