Además, el parque alberga también notables esculturas y fuentes, que contribuyen a erigirle como el espacio de tranquilidad por excelencia de la capital.
A las doce había empezado el calor. El tren se detuvo diez minutos en una estación sin pueblo para aprovisionarse de agua. Afuera, en el misterioso silencio de las plantaciones, la sombra tenía un aspecto limpio.